Palabras, simples palabras, que a veces se nos olvida pronunciar, que a veces las damos por entendidas sin pararnos a pensar que algún día nos arrepentiremos de no haberlas pronunciado.
Gestos de afecto que no damos por comodidad y el día que queramos darlos quizás sea demasiado tarde para ello.
Amistades, amores, familiares que se van de nuestras vidas sin saber lo que nos importan porque nunca nos hemos atrevido a decirles nada.
¿Por qué?
Tania Ferre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario